Por los Pueblos Negros de Guadalajara (Colmenar de la Sierra, La Vereda, Matallana, Roblelacasa, Muralla China, Corralejo)

FUENTE DE INFORMACIÓN: Cartografía del Instituto Geográfico Nacional, visor Iberpix 4.
FOTOGRAFÍA: iPhone 11 Pro.
ZONA: Entorno de los pueblos abandonados de Ayllón, Cañones de los ríos Jarama y Jaramilla - Sierra de Ayllón central, Sistema Central.
DESDE: la carretera GU-180 (1211 m), unos 400 m antes de entrar en Colmenar de la Sierra, provincia de Guadalajara.
CERCA DE: Colmenar de la Sierra, Corralejo, Cabida, Bocígano, La Hiruela, Roblelacasa.
ÉPOCA: julio de 2021.
TIPO DE RUTA: circular.
NIVEL DE DIFICULTAD: moderado.
Datos descargados de GPS SUUNTO Ambit3: Longitud: 43,54 km. Desnivel acumulado positivo: 1062 m. Desnivel acumulado negativo: 1062 m. Punto más alto: 1410 m. Punto más bajo: 987 m. Tiempo empleado: 5 h 04 min (con calma y paradas para sacar fotos y marcar waypoints). Tiempo en movimiento: 3 h 51 min.
MATERIAL: bicicleta de montaña.
TIPO DE FIRME: carretera, pista forestal, sendero.
AGUA: fuentes en Colmenar de la Sierra, Roblelacasa y Corralejo (Fuente de Arriba), Fuente de la Virgen. Se cruzan los Arroyos de los Cercados, de la Dehesa, de Matallana y de Corralejo, así como los ríos Jarama y Jaramilla.
SEÑALIZACIÓN: marcas del PR-GU 02.

ITINERARIO:
Colmenar de la Sierra (GU-180, 400 m antes de llegar al pueblo) – Cueva de la Virgen de Fátima – Arroyo de los Cercados – Arroyo de la Dehesa – La Era Llana – Camino de La Vereda – Puente sobre el río Jarama – Los Pozuelos – Prados del Otro Lado – Collado Mingo Serrano (1308 m) – Fuente de la Virgen – Collado de la Vihuela (1415 m) – Collado de las Palomas (1429 m) – Collado de San Cristóbal (1434 m) – Camino de los Arrieros – Camino de La Vereda a Matallana – La Vereda (1080 m) – Camino de La Vereda a Matallana – Matallana (1000 m) – Camino de Roblelacasa (PR-GU 02) – Puente de los Trillos – El Fresno – Las Quemadas – Roblelacasa (1100 m) – Torre de Rozado del Lugar – PR-GU 04 – GU-194 – Muralla China – Puente sobre el río Jaramilla – Mirador del Cuchillar del Asomante – Corralejo (1260 m) – GU-181 – Fuente de Arriba – Mirador de Corralejo (1340 m) – Hoya del Bosque – GU-180 – Colmenar de la Sierra.

Descárgate la ruta y accede a más información (mapas, waypoints, altimetrías, fotos) en el siguiente enlace de Wikiloc:
Por los Pueblos Negros de Guadalajara (Colmenar de la Sierra, La Vereda, Matallana, Roblelacasa, Muralla China, Corralejo)

EL ENTORNO:
Descubre más acerca de la zona en los siguientes enlaces de nuestro blog:
La Sierra de Ayllón
El entorno de los pueblos abandonados de Ayllón
Colmenar de la Sierra, La Vereda, Matallana, Roblelacasa, Corralejo

LA RUTA:
La ruta de hoy es una circular que une 5 pueblos negros de Guadalajara: Colmenar de la Sierra, La Vereda, Matallana, Roblelacasa y Corralejo.

Partimos de Colmenar de la Sierra, preciosa aldea semi-abandonada ubicada entre los cerros de Corralejo, San Cristóbal y Cabeza del Viejo. Unos 400 m antes de llegar al pueblo por la GU-180, vemos a la derecha una extensa pradera donde suele haber vacas pastando y en la que se puede dejar el coche. Mirando en dirección S, identificamos el Collado de la Vihuela, a donde primero nos vamos a dirigir.

Salimos por la carretera en dirección El Cardoso de la Sierra. A los pocos metros, dejamos a la derecha la Cueva de la Virgen de Fátima, muy cuidada por los vecinos (a la vuelta subimos hasta ella).

Tras cruzar sobre los Arroyos de los Cercados y de la Dehesa, en La Era Llana (km 2,7 de ruta), abandonamos el asfalto desviándonos a la izquierda por el Camino de La Vereda. Un cartel, hoy tirado en el suelo, nos indica que hasta el pueblo hay 17 km.

La pista desciende inicialmente hasta el Puente del Jarama, llamado por algunos Puente de Colmenar, aunque el verdadero «Puente de Colmenar» está en ruinas río abajo.

A partir de ahí, afrontamos una subida constante de casi 6 km hasta el Collado de la Vihuela. En el camino, pasamos por Prados del Otro Lado (donde ignoramos un ramal que sale a la derecha hacia Montes Claros), por el Collado Mingo Serrano (1308 m), cruce de caminos en el que seguimos de frente, y por la Fuente de la Virgen. Pasada la fuente, ignoramos también un ramal hacia la derecha que conduce a la Cañada Real del Collado de las Palomas.

El Collado de la Vihuela (1415 m) es un cruce de caminos, desde el que se tiene una muy buena vista de La Tornera, el Cerro San Cristóbal y Colmenar de la Sierra. Por él pasa el Cordel de San Cristóbal, una ancestral vía pecuaria.

Obviamos los ramales hacia La Vihuela y hacia la Loma de la Peña y Cabeza del Viejo, y seguimos de frente, pasando primero por el Collado de las Palomas (1429 m) y a continuación por el Collado de San Cristóbal (1434 m), ubicado al pie del cerro del mismo nombre.

A partir de ahí, la pista pasa a llamarse Camino de los Arrieros y desciende durante 6,5 km hasta desembocar en el Camino de La Vereda a Matallana. Durante la bajada, muy rápida y en buen estado, disfrutamos de una excelente panorámica de la cara N del Cordal de La Tornera y Las Centeneras sobre el Valle de Vallosera. A la altura de Torregüelos y Mondragón salen sendos ramales a la derecha que hemos de ignorar.

Una vez en la intersección, giramos a la derecha y continuamos por la nueva pista 1,5 km sin apenas desnivel hasta llegar a La Vereda (1080 m).

Esta preciosa aldea, ubicada sobre un cortado creado por el Arroyo de Vallosera, fue abandonada en 1971 y está actualmente en proceso de rehabilitación y repoblación. Hoy nos adentramos por sus callejuelas hasta llegar a la Iglesia de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, hasta donde antaño subía a caballo el cura de Tamajón para dar misa.

De vuelta en la pista, deshicimos lo andado hasta el cruce con el Camino de los Arrieros y obviando éste, continuamos de frente durante 3 km hasta Matallana. Este tramo no es muy apto para hacer en coche porque tiene algunas roderas bastante profundas, pero no plantea dificultad alguna para la bici. A la altura de El Robledo, hemos de ignorar dos ramales que salen a mano izquierda.

El pueblo de Matallana (1000 m) no es tan pintoresco como La Vereda, porque está en un llano y las casas están un tanto desperdigadas y tapadas por la arboleda, por lo que, al menos desde tan cerca, no podemos apreciar el conjunto de un vistazo. Al fondo, en su extremo N, escondidas entre la maleza, están las ruinas de la preciosa Iglesia de San Juan Bautista.

Un poco más al S, está el núcleo principal de casas, junto al que encontramos indicaciones del Camino de Roblelacasa (PR-GU 02), por el que seguimos.

El sendero, empinado y un tanto pedregoso, baja inicialmente hasta el Puente de los Trillos, una pasarela sobre el río Jarama, representativa de la Arquitectura Negra y con una curiosa historia detrás.

El Puente de los Trillos

La existencia de un puente en este emplazamiento se remonta al S. XVI (año 1594). El puente primitivo estaba un poco más abajo que el actual, como demuestran los restos del pilar de mampostería de pizarra del margen derecho del río y el soporte de la orilla contraria, fácilmente identificables desde el puente moderno. Debía ser un puente sencillo, rústico, apto para peatones y caballerías.

Con posterioridad, se construyó otro puente unos 40 metros cauce arriba denominado «Puente de los Trillos«. Su nombre tenía que ver con su estructura, formada por dos trillos sustentados por vigas de madera. La configuración de este puente es muy similar a otro puente vecino, el que hay sobre el Arroyo de Vallosera en el pueblo de La Vereda (año 1602). Ambos están construidos sobre dos grandes bases o pilones de mampostería de pizarra, con entablado de vigas y tablas de madera como paso. Sin embargo, la obra del Puente de los Trillos fue de mucha más envergadura, ya que a diferencia del de La Vereda, que está situado en un vado, éste fue levantado a mucha más altura en un espectacular cortado del río Jarama. A partir de 1972, año en el que Matallana fue abandonado, el puente dejó de mantenerse por los vecinos y se abandonó a su suerte, sufriendo un deterioro progresivo. Durante los años siguientes, solamente algunos osados ciclistas y caminantes lo cruzaban, mientras el puente se movía y las tablas se rompían a su paso.

Así, hasta el año 2009, en el que se inauguró en el mismo lugar el «Puente moderno de Matallana«, con suelo de madera, barandillas metálicas a ambos lados y petos de mampostería en los extremos. Curiosamente, se quiso conservar como recuerdo la antigua estructura de madera del «Puente de los Trillos» y para ello se dejó intacta bajo la pasarela actual (se puede ver en las fotos adjuntas).

Hoy, a pesar de estar en pleno verano, el paraje estaba espectacular.

Al otro lado, iniciamos una subida de unos 3 km por el PR-GU 02 que nos llevará a Roblelacasa. Las rampas más duras están al principio, donde dejamos a la derecha el desvío a las Pozas o Cascadas del Aljibe.

Al llegar a la zona de El Fresno, donde encontramos una barrera, la pendiente nos da una pequeña tregua, pero enseguida vuelve a picar hacia arriba hasta llegar al Alto de Las Quemadas, un buen mirador en el que tomar un poco de aire.

A partir de ahí, ya es prácticamente llano hasta Roblelacasa (1100 m), otro pueblo de la Arquitectura Negra que bien merece una visita.

Hoy pasamos junto a su Iglesia, que cuenta con una preciosa espadaña, y callejeamos hasta su Plaza Mayor, cuya fuente, por desgracia, estaba seca.

Abandonamos el pueblo dejando a la derecha la Torre de Rozado del Lugar y seguimos por un camino ancho (PR-GU 04) hasta desembocar en la GU-194.

Giramos por la carretera a la izquierda y continuamos por ella hasta la Muralla China.

La Muralla China es un monumento natural. Una pista de hormigón rugoso que serpentea vertiginosamente por las dos laderas del Cañón del río Jaramilla. Sus famosas curvas en herradura y sus rampas de hasta el 18% la convierten en una exigente prueba física si se recorre en bici. La carretera está flanqueada por paredes de pizarra y no es infrecuente ver desprendimientos que bloquean parcialmente el paso, especialmente en el margen derecho del río. Este tramo de la GU-194, aunque en regular estado, es de vital importancia, ya que es la única vía de comunicación directa entre los pueblos del Hoyo de la Sierra Negra al pie del Ocejón (Campillo de Ranas, Majaelrayo, Campillejo,…) y las aldeas del margen derecho del Jaramilla (Corralejo, Cabida, Peñalba de la Sierra), Bocígano, El Cardoso de la Sierra y los pueblos de la Sierra del Rincón. La otra opción para ir de una lado al otro es dar un rodeo de casi 100 km. El nombre del paraje se debe al parecer a los pretiles de piedra que protegen del precipicio, que vistos desde la ladera de Corralejo, evocan (con un tanto de imaginación) el famoso camino de la Gran Muralla China.

Al poco de iniciar la bajada, nos desviamos a pie unos 50 m para contemplar el Cañón del Jaramilla desde una atalaya. Totalmente opcional pero un espectáculo.

En el fondo del barranco, cruzamos el Jaramilla por un precioso puente de tres arcos construido con pizarra negra, que es punto de inflexión entre la bajada y la subida por la ladera contralateral.

La subida por la ladera occidental es igual de pendiente pero más larga, ya que se prolonga hasta pasado Corralejo. En la primera curva pronunciada a derechas, tenemos el Mirador del Cuchillar del Asomante, un buen punto para tomar aliento admirando el Cañón del Jarama.

Unos 800 m más arriba, el asfalto deja de ser rayado y la pendiente afloja un poco hasta llegar a Corralejo (1260 m). Por desgracia, encontramos el Bar de Pedro cerrado y tuvimos que seguir subiendo hasta la Fuente de Arriba (Arroyo de Corralejo) para refrescarnos.

La subida termina por la GU-181 en el Mirador de Corralejo (1340 m), desde donde se tiene una muy buena vista de Cabeza de Cabida y el Cañón del Arroyo de San Regalta antes de su confluencia con el Cañón del Jaramilla (aunque realmente se ve mejor desde un poco más adelante, porque estorba menos el cableado de la luz).

Aproximadamente 1 km después del mirador, abandonamos la carretera para tomar una pista a la izquierda, por la que tras 2 km de rápido descenso desembocamos en la GU-180. Giramos por ésta a la izquierda y en apenas 300 m, llegamos de vuelta al coche. Finalizada la ruta, visitamos la Cueva de la Virgen de Fátima, que alberga una de las tres Vírgenes de Fátima que hay en Guadalajara. Un hermoso lugar que demuestra la mucha devoción que se procesa a esta virgen, tan íntimamente ligada al pastoreo, en este rincón de España.

Desde el punto de vista técnico, el recorrido carece de dificultad, a excepción de la bajada al Puente de los Trillos desde Matallana, cuyo rocoso final tiene algo de miga. La dureza de la ruta viene determinada por el desnivel acumulado positivo de más de 1000 m en apenas 43 km.

En resumen, una ruta increíble, en la que la falta de atractivo técnico se suple con creces con la belleza de los paisajes y el enorme encanto de los pueblos, pequeños tesoros de arquitectura negra, donde pervive calladamente la historia de la zona más recóndita y olvidada de la Sierra de Ayllón.