Nuestra montaña de hoy tiene el honor de haber formado parte de la Merindad más longeva del Reino de León, la de Valdeburón. Sus laderas han sido testigo de múltiples conflictos bélicos a lo largo de la historia, como la batalla de Bérgida entre cántabros y romanos (26 a.C.), las guerras entre moros y cristianos (S.VIII y IX) y la confrontación entre carlistas e isabelinos (S.XIX). La más reciente y dolorosa se libró en los despachos, aunque también en las calles, en las que los riañeses, palo en mano, hicieron frente a los antidisturbios (año 1986). Todo por evitar la expropiación y demolición de sus casas para la construcción del embalse que hoy inunda el valle. Desde 1994, nuestra mítica cumbre forma parte del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre, que junto a los Picos de Europa constituye el mayor macizo calizo de Europa Occidental. Además, da nombre a uno de los clubes montañeros más antiguos (año 1972) y con mayor raigambre de la provincia de León. Desde su cima se disfruta de una de las panorámicas mas espectaculares de la Cordillera Cantábrica, lo que unido a su bonita silueta y a su pintoresca ubicación sobre el embalse y el pueblo de Riaño, la han hecho merecedora de su nominación como una de las 12 montañas más bellas de León (fuera de los Picos de Europa eso si). Sus diferentes nombres obedecen a un pique, que viene de lejos, entre los vecinos de Riaño y los de Burón. Para los primeros, que miran a sus caras S y E, es “Yordas”, mientras que para los segundos, que viven a orillas del Esla bajo su cara N, es “Burín” o “Burón”.

Hoy os invito a conocer este majestuoso pico. Para ello os propongo una travesía de 14,5 km y unos 900 m de desnivel acumulado positivo, que asciende al Yordas desde el Valle de San Pelayo. La ruta parte teóricamente desde el pequeño pueblo leonés de Liegos (1130 m), ubicado en el Valle de Valdeburón, en la orilla derecha del río Esla, poco antes de que este desagüe en el Embalse de Riaño. Desde allí arrancamos en dirección S por una pista ancha denominada Camino de San Pelayo. Por ella discurre el PR-LE 32, que une Liegos con Acebedo. Como quiera que este primer tramo es bastante anodino y que el carretil es apto (a día de hoy) para todo tipo de vehículos, nos ahorramos los primeros 3 km y dejamos el coche a la altura de La Solana, un poco después de donde se unen el camino de ida y de vuelta de la clásica circular al pico. Durante el trayecto se disfruta de una inmejorable vista de la cara S del Burín sobre el Valle de San Pelayo, llamado así porque en su día albergó una ermita dedicada a San Pelayo niño, cuya imagen se conserva actualmente en la Iglesia de Liegos.



Comenzamos a caminar, disfrutando a mano izquierda de las vistas del Monte de las Llampas, como se conoce al pie de sierra de la cara N del cordal del Yordas.




La pista sube de forma casi imperceptible entre verdes praderas paralela al río, que primero se llama Belluco y luego, tras cruzar el Arroyo de Salgueredo, pasa a ser el Valverga.


A medida que ganamos altura, se nos va abriendo a la izquierda el Bosque de Tendeña, por el que subiremos en busca del Collado Baguyoso.


A los 2,5 km de ruta, después de pasar unos establos conocidos como Los Portales de Liegos y la pequeña Cruz de piedra de Las Agüeras, llegamos a la pradera de Los Sotos, donde abandonamos la pista y el PR tomando un camino a la izquierda que cruza el río por un puente. Unos metros antes hay sitio para dejar el coche, por lo que mucha gente empieza la ruta aquí.




Enseguida nos topamos con una cancela para el ganado, que nos da acceso al Bosque de Tendeña.


El camino sube serpenteando por el precioso hayedo, alternando tramos bastante “pindios” con otros más descansados.



En una de sus curvas encontramos la Fuente la Tejal (1467 m), una auténtica bendición para el montañero por su agua fresca y pura.


En la siguiente revuelta dejamos el camino, que sigue rumbo a la Collada de Tendeña, desviándonos a la izquierda por la Senda Bahuyoso.


Se trata de una estrecha vereda de 1,5 km que conduce al puerto que le da nombre. Arranca cruzando un arroyo y remontando suavemente el extremo nororiental del Monte de Tendeña. Al cruzar una pedrera, al pie de un rocoso contrafuerte que alberga un covachón, divisamos los Picos de Mampodre entre el Pico Lázaro y la Peña Mediodía.



Un poco más arriba, en el Collado de la Canalina (1550 m), avistamos ya los primeros riscos de la precima del Yordas, que en los mapas clásicos se denomina Peña Burín.

Tras otro pequeño tramo de bosque, entre cuyas jóvenes hayas se puede ver en la lejanía el Macizo Occidental de los Picos de Europa o del Cornión presidido por Torre Santa y Torre Bermeja, salimos definitivamente a campo abierto.



Abajo a la izquierda vemos desplegado el Valle de San Pelayo, en el que identificamos el punto desde el que salimos. Por delante, una zona de vegas conocida como Majada Bahulloso, donde antiguamente había un corral y una fuente. Hoy solo se intuyen sus ruinas, vestigios de lo que otrora fueron los puertos de montaña del Yordas, tan apreciados por sus pastos y en los que los rebaños trashumantes de oveja merina pasaban los meses de verano.



Y al fondo vemos el Collado Bahulloso o Bagulloso (1675 m), al que llegamos transitando cómodamente por la vaguada que se insinúa entre Peña Burín (a la izquierda) y el cordal presidido por un precioso pico anónimo (derecha), que nos separa de la Vertiente de Tendeña. Por continuidad bien podría llamarse Peña Bahulloso (1778 m).


Desde el collado ya se alcanza a ver la cumbre del Yordas emergiendo por detrás de Peña Burín.

A partir de ahí la cosa se endurece, ya que hemos de afrontar una exigente diagonal hasta la cima, aproximadamente 1 km por terreno pedregoso, en el que superamos unos 290 m de desnivel (pendiente media del 29%). Solo hay dos descansos, un collado (1753 m) en el que pasamos entre dos grandes hitos y el rellano de la antecima o Collado del Yordas (1870 m).





La cima del Pico Yordas o Burín (1964 m) es una atalaya única para admirar la montaña leonesa y palentina. En ella encontramos una cruz de hierro que soporta un pequeño buzón de montaña, el cual fue colocado por el Grupo de montañeros “Vetusta” el 6 de septiemre de 1987. Curiosamente, le atribuyen al pico 3 metros más (1967) que el IGN. A lo largo de la historia ha habido varias cruces. La primera, de 8 m de altura, fue puesta el 13 de agosto de 1950 por iniciativa de D. Miguel Manteca López, registrador de la propiedad de Riaño. Tras ser derribada por un vendaval y recolocada, sucumbió definitivamente a las inclemencias del invierno. Durante muchos años, solo el carcomido listón vertical permaneció en pie, mientras que los restos del madero horizontal yacían desperdigados entre los canales de la pared norte.

Las vistas son espectaculares se mire a donde se mire.
Hacia el NO, los Picos de Mampodre y Peña Ten.

Hacia el NE, los Picos de Europa.


Hacia el SE, el Embalse de Riaño y la Montaña Palentina.


Y hacia el SO, el cordal de Peña Cabeza, el Peñas Pintas y el Pico Llerenes.


Y dejándonos caer un poco hacia el E, tenemos una estupenda perspectiva sobre la Pared Borín, la Majada de Yordas y el Collado Burín.



Descubre más detalles acerca del recorrido y de la zona en los siguientes enlaces de nuestro blog y de Wikiloc:
Pico Yordas o Burín desde el Valle de San Pelayo (Liegos)
La ruta en Wikiloc
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