FUENTE DE INFORMACIÓN: Cartografía del Instituto Geográfico Nacional, visor Iberpix 4. FOTOGRAFÍA: iPhone 11 Pro. ZONA: El Pinar de Navafría, Vertiente septentrional de los Montes Carpetanos, Sierra de Guadarrama, Sistema Central. Provincia de Segovia. DESDE: Área recreativa El Chorro (1316 m), provincia de Segovia. CERCA DE: Navafría, Ceguilla, Gallegos, Lozoya, Pinilla del Valle. ÉPOCA: febrero de 2021. Tiempo: despejado. TIPO DE RUTA: circular. NIVEL DE DIFICULTAD: moderado. Datos descargados de GPS SUUNTO Ambit3: Longitud: 18 km. Desnivel acumulado positivo: 734 m. Desnivel acumulado negativo: 734 m. Cota máxima: 1793 m. Cota mínima: 1327 m. Tiempo empleado: 5 h 26 min (con calma y paradas para fotos y para marcar waypoints). Tiempo en movimiento: 3 h 56 min. MATERIAL: GPS, senderismo (sin nieve). Raquetas (nieve). AGUA: 2 fuentes (en el área recreativa y en El Chorro). Se cruzan los Arroyos del Chorro, Sequillo, de Navalcollado, de Piemediano y de las Vueltas. TIPO DE FIRME: pista forestal, pista asfaltada (antigua carretera), sendero. SEÑALIZACIÓN: letreros indicativos, marcas blancas y amarillas del PR.
ITINERARIO:
Área recreativa de El Chorro (1316 m) – Refugio El Chorro – Cruce del Arroyo del Chorrro (I) – El Chorro de Navafría, puente sobre el Arroyo del Chorro (II) – Mirador sur de la cascada – Ladera de los Berrunos – Las Cebadillas – Ladera de los Berrunos – Mirador de los Castillejos o de las Cebadillas (1545 m) – Mirador inferior – Arroyo Sequillo – Arroyo de Navalcollado – Refugio de Regajohondo (1729 m) – Pista de esquí de fondo Navafría – Refugio de Navalcollado (1791 m) – Pista de esquí de fondo Navafría – Refugio de Regajohondo – Arroyo del Chorro – Refugio de Piemediano Bajo (1670 m) – Arroyo de Piemediano – Refugio de Piemediano (1770 m) – Ladera de la Boca del Asno – Chorrera del Arroyo de las Vueltas – Refugio de la Fragua – Refugio del Peñón (1440 m) – Área recreativa de El Chorro.
Descárgate la ruta y accede a más información (mapas, waypoints, altimetrías, fotos) en el siguiente enlace de Wikiloc:
Ruta de los 7 refugios en torno al Chorro de Navafría

EL ENTORNO:
Descubre más acerca de la zona en los siguientes enlaces de nuestro blog:
La Sierra de Guadarrama
Los Montes Carpetanos
EL PINAR DE NAVAFRÍA:
El Monte Pinar de Navafría, propiedad de la Comunidad de Villa y Tierra de Pedraza, tiene 3832 ha de superficie pública, de las que 2843 (74%) son masas naturales arboladas de la especie principal, el pino silvestre (Pinus sylvestris), también conocido como pino “de Valsaín”, “rojo”, “albar” o “serrano”. Está ubicado en la vertiente septentrional de los Montes Carpetanos, en la cabecera del Valle del río Cega.


LA CASCADA Y LOS RÍOS:
El Chorro de Navafría, o simplemente “El Chorro”, es una de las cascadas más importantes de la vertiente septentrional de la Sierra de Guadarrama. Está ubicada unos 2 km al sur del pueblo de Navafría (Segovia), a 20 minutos del Área recreativa que lleva su nombre. Las aguas que la alimentan son las del Arroyo del Chorro, que nace a más de 2000 m de altitud en la falda norte del Pico del Nevero (Montes Carpetanos) y es afluente del Río Cega. Poco antes de su desembocadura, a unos 1400 m de altitud, forma este espectacular salto de agua de más de 20 m de altura, escalonado en 2 tramos separados por un tobogán intermedio.
El río Cega nace en la vertiente N de la cuerda carpetana, bajo la ladera del Cerro Malo, de la fusión de los arroyos del Artiñuelo, Las Mostrencas y Peñacabra. Atraviesa los pinares de umbría y bordea el pueblo de Navafría, adentrándose en la meseta segoviana cerca de Pedraza, donde discurre por un curioso cañón tras unirse al río del Pontón. Posteriormente, entra en la Tierra de Pinares, atravesando los términos de Turégano, Aguilafuente y Cuéllar. Tras recibir por su izquierda las aguas del río Pirón, entra en la provincia de Valladolid, donde finalmente, tras haber recorrido unos 130 km, vierte sus aguas al Duero a la altura de Viana de Cega.
LA RUTA:
La ruta de hoy es una circular por el Pinar de Navafría, pasando por 7 refugios libres de montaña (El Chorro, Regajohondo, Navalcollado, Piemediano Bajo, Piemediano, La Fragua y El Peñón), el Mirador de las Cebadillas (o de los Castillejos) y dos cascadas: El Chorro de Navafría y la Chorrera del Arroyo de las Vueltas.
Partimos del Área recreativa de El Chorro (1316 m), a la que se accede desde las afueras de Navafría por una pequeña carretera que parte de la SG-612 en dirección S. La zona, que se extiende a la vera del Río Cega, cuenta con una gran piscina natural, una cantina, barbacoas y múltiples mesas de madera. Dejamos el coche en el último aparcamiento, enfrente de la cantina.






Comenzamos a caminar por la pista asfaltada por la que se prolonga la carretera de acceso. Enseguida dejamos a mano izquierda el Refugio El Chorro, al lado del cual hay una fuente y unos columpios rústicos. Llama la atención su estructura, de techo abovedado de cemento, que vamos a ver repetida en otros refugios a lo largo de la travesía. Lo encontramos cerrado, quizá por la proximidad al área recreativa. Detrás de una barrera que bloquea el paso a los coches, la pista pasa por encima del Arroyo del Chorro, que a esta altura vierte sus aguas en el Río Cega. Un letrero nos indica que estamos sólo a 20 min de la cascada.







Escasos metros después, dejamos la pista, que sigue de frente hacia El Peñón (por donde luego volveremos), para tomar un desvío a la izquierda en dirección a El Chorro. El camino asciende entre pinos, paralelo por la derecha al arroyo que alimenta la cascada. La mayoría son pinos silvestres o de Valsaín, muy comunes en Guadarrama, caracterizados por tener un tronco espigado de corteza anaranjada. Bajo su sombra, se esconde algún que otro acebo que nos recuerda a nuestros queridos Ancares.





Divisando ya la cascada, encontramos una bonita fuente a mano derecha, de cuya parte alta parte un sendero hacia la Fuente de los Castillejos.


Un puente de madera, tendido entre dos muros de mampostería hechos con pequeños bloques piedra granítica, cruza el Arroyo del Chorro bajo la cascada. El llamado Chorro de Navafría estaba hoy espectacular: solitario (cosa rara), rebosante de agua por el deshielo y con el intenso verde del musgo tapizando sus márgenes. Unas escaleras que hay a la derecha permiten acceder a un mirador ubicado en la parte alta de la chorrera, pero hoy la entrada estaba cerrada con unos paneles de madera.





Al otro lado de la pasarela, el sendero continúa sobre el margen derecho del arroyo, pero enseguida lo abandonamos para subir campo a través hasta alcanzar un camino que cruza la ladera unos 20 m más arriba.




Merece la pena retroceder un poco hacia la derecha para ver la cascada desde su parte alta. El único escollo es un pequeño canchal, en el que la combinación de humedad, musgo y piedra resulta especialmente resbaladiza.


Al fondo del mismo y encaramándonos a una roca, podemos disfrutar de una estupenda perspectiva del tobogán de roca granítica pulida por el que se desliza en agua entre el chorro superior y el inferior. Enfrente tenemos el mirador alto, al que se llega desde el puente por las escaleras (hoy cerradas).



Deshaciendo lo andado, retomamos el camino, que durante unos 700 m sin apenas desnivel nos condujo por la Ladera de los Berrunos, hasta desembocar en la pista semi-asfaltada que sube desde la casa forestal de Majalcarro.






Continuamos por ésta hacia la derecha. A los 200 m, en un giro a la derecha de casi 180º, ignoramos un ramal a la izquierda hacia Majalcarro y los Cerros de la Hiruela y Picardeñas, al tiempo que pasamos sobre un paso canadiense que hay junto a una barrera.


La pista sigue subiendo con moderada pendiente por Las Cebadillas y la Ladera de los Berrunos hasta llegar al Mirador de los Castillejos (1545 m), también llamado de las Cebadillas. De frente, tenemos una impresionante panorámica del Pinar de Navafría y Pie Mediano (por el que pasaremos luego), en cuya verde falda recubierta de pinos relucen los peñascos graníticos de los Castillejos Encimeros y Bajeros.








Unos metros más abajo hay un segundo mirador, al que se llega por un desvío que sale a la derecha un poco más arriba. Merece la pena, son apenas 100 m y la vista del valle es muy buena.







Tras reincorporarnos a la pista, retomamos la subida en dirección al Puerto de Navafría paralelos al Arroyo del Chorro. Casi de forma imperceptible, pasamos sobre dos de sus afluentes: primero el Arroyo Sequillo y luego el de Navalcollado.




A partir de ahí, caminamos prácticamente a la vera del río, que hoy bajaba alegre formando pequeños saltos de agua. Poco a poco, la nieve fue haciendo acto de presencia.








Sobrepasados los 1700 m de altitud, nos encontramos con una bifurcación. Por la derecha sale una pista por la que iremos luego.




Ahora seguimos de frente hacia el Refugio de Regajohondo (1729 m), que está escasos metros más adelante.



Pasado éste, desembocamos en la pista de esquí de fondo Navafría y cambiamos el asfalto por la tierra. Hacia la derecha llegaríamos a la parte alta de Piemediano, pero nosotros giramos a la izquierda en dirección al Puerto de Navafría para subir hasta el Refugio de Navalcollado (1791 m). La cabaña, a día de hoy en regular estado de conservación (no tiene puerta ni ventanas), está ubicada en una pequeña pradera escondida entre los pinos, a caballo entre las vertientes de los arroyos de Navalcollado (al O) y de la Majada de la Loba (al E). Para acceder a ella, hay que continuar algo más de 1 km por la pista y luego desviarse a la izquierda, recorriendo unos 100 m campo a través por una zona un tanto anegada (al menos en esta época) donde nace el Arroyo de Navalcollado. A diferencia de los anteriores, el refugio tiene un tejado “a un agua” cubierto con tejas.







Desde allí, deshicimos lo andado hasta la bifurcación junto al Arroyo del Chorro, en la que esta vez tomamos la pista de la izquierda, que arranca cruzando el río después de que éste se precipite desde un pequeño estanque o balsa de agua.







En suave pendiente descendente, atravesamos el pinar de la ladera oriental de Piemediano y tras poco más de 1 km, llegamos al cuarto refugio, un “sin nombre” en los mapas, que algunos llaman de Piemediano Bajo. Ubicado al lado del arroyo que baja del cerro, tampoco goza de puerta ni de ventana, pero bien nos puede salvar de una inoportuna tormenta.






Unos 100 m después, abandonamos la pista para coger un sendero que sube a la izquierda y que tras empalmar con otro (que sale también de la misma pista más adelante), remonta la empinada ladera hasta el Refugio de Piemediano (1770 m). A medida que subimos, la senda se va desdibujando, entre otras cosas, por la gran cantidad de ramas caídas, pero en cualquier caso avanzamos sin problemas guiados por el GPS. La cabaña, prácticamente calcada a la de Navalcollado, está igual de descuidada, aunque decente.








A continuación, afrontamos la parte más dura de la ruta, el fuerte descenso por la ladera N de Piemediano hasta desembocar de nuevo en la pista a la altura de la Ladera de la Boca del Asno. En teoría hay sendero, pero en nuestro caso, la nieve borró todo rastro de él. Inicialmente nos animamos, al ver unos hitos que hay sobre unas rocas en la trasera del refugio, pero enseguida perdimos el rastro y tuvimos que descender buscando el mejor paso entre los pinos y hundiéndonos hasta media pierna. En cualquier caso, son menos de 500 m y le da algo de picante a la ruta 😜.




Una vez abajo, giramos a la izquierda. Tras obviar un temprano sendero que sale a mano derecha (por el que podríamos acortar la ruta ya que conduce al área recreativa El Chorro), seguimos bajando suavemente en dirección SO, pasando sobre el Arroyo de las Vueltas y atravesando la ladera de El Pasil. A nuestra derecha, el Valle del río Cega y como telón de fondo, las nevadas cumbres carpetanas.






Al llegar a la teórica linde entre los términos municipales de Navafría y Torre Val de San Pedro, la pista realiza un brusco giro a la derecha de casi 180º y vuelve a cruzar el Arroyo de las Vueltas, que antes de entregar su agua al Cega forma en este punto una preciosa chorrera (supongo que estacional). Al que no le importe trepar, merece la pena subir unos metros para verla bien.




Escasos metros después, llegamos a una bifurcación. El ramal de la izquierda baja al Puente de Hierro sobre el río Cega (que en realidad es de piedra). Nosotros seguimos de frente hacia el refugio que vemos al fondo, el de La Fragua, de aspecto similar al de Regajohondo y Piemediano Bajo: paredes de piedra, tejado abovedado de hormigón con chimenea en un extremo, una puerta y un ventanuco.





Desde allí, seguimos bajando por la Ladera de la Boca del Asno paralelos al río Cega, que poco a poco vamos dejando más y más abajo. Tras dejar a la derecha un sendero que conduce directamente al Chorro, llegamos al último de los refugios, el del Peñón (1440 m), desde cuyas inmediaciones se tiene una preciosa vista del río encajonado en un estrecho cañón. Estéticamente, se parece a los de Navalcollado y Piemediano por tener el techo de tejas, pero en este caso es “a dos aguas”.









Finalmente, haciendo una zeta, la pista baja hasta contactar con el río, al que ya no abandona hasta llegar de vuelta al área recreativa.






Desde el punto de vista técnico y con la salvedad de la subida y bajada a Piemediano, el recorrido es muy fácil, ya que discurre por pista y sendero en muy buen estado.
En resumen, una ruta entretenida para disfrutar del típico paisaje de los Montes Carpetanos, suaves cumbres con laderas tapizadas de pinar, aderezado con las visitas a los 7 refugios libres, al Mirador de los Castillejos y especialmente, al precioso Chorro de Navafría y a la sorprendente (por inesperada) Chorrera del Arroyo de las Vueltas.