Pico Moncayo desde Haya Seca Circular (subida por el Santuario y La Escupidera y bajada por el Collado de Castilla)

FUENTE DE INFORMACIÓN: Cartografía del Instituto Geográfico Nacional, visor Iberpix 4.
FOTOGRAFÍA: iPhone 14 Pro.
ZONA: Sierra del Moncayo, Parque Natural del Moncayo - Sistema Ibérico.
DESDE: Aparcamiento de Haya Seca (1580 m).
CERCA DE: San Martín de la Virgen del Moncayo, Vozmediano, Litago, Lituénigo, Vera de Moncayo.
ÉPOCA DE REALIZACIÓN: junio de 2023.
TIPO DE RUTA: circular.
NIVEL DE DIFICULTAD: moderado.
Datos descargados de GPS GARMIN Fénix 7: Longitud: 11,64 km. Desnivel acumulado positivo: 860 m. Desnivel acumulado negativo: 860 m. Cota máxima: 2315 m. Cota mínima: 1572 m. Tiempo empleado: 5 h 57 min (con calma y paradas para fotos y para marcar waypoints). Tiempo en movimiento: 3 h 06 min.
MATERIAL: GPS, senderismo (sin nieve). Crampones (con nieve y hielo, recomendable llevar piolets en La Escupidera si hay hielo).
AGUA: Fuente del Chorro, fuente en el Santuario.
TIPO DE FIRME: pista, sendero, senda cimera.
SEÑALIZACIÓN: letreros hasta la base del Pozo San Miguel e hitos desde allí a la cima.

ITINERARIO:
Aparcamiento de Haya Seca (1583 m) – Fuente del Chorro – Santuario y Albergue de Nuestra Señora del Moncayo (1610 m) – GR-90 – Sendero AG-1 – Base del Pozo de San Miguel o “Cucharón” (1840 m) – La Escupidera (2170 m) – Alto del Collado de las Piedras (2259 m) – Cerro de San Juan (2282 m) – Collado del Alto de las Piedras (2256 m) – Moncayo o Pico San Miguel (2315 m) – Collado de Pasalobos o de Castilla (1949 m) – Sendero AG-1 – Barranco de Agramonte – Peña Nariz (1840 m) – Haya Seca.

Descárgate la ruta y accede a más información (mapas, waypoints, altimetrías, fotos) en el siguiente enlace de Wikiloc:
Pico Moncayo desde Haya Seca Circular (subida por el Santuario y La Escupidera y bajada por el Collado de Castilla)

EL ENTORNO Y LAS MONTAÑAS:
Descubre más detalles acerca de las montañas y la zona en el siguiente enlace de nuestro blog:
Sierra del Moncayo

LA RUTA:
La ruta de hoy es una circular al Moncayo (2315 m) desde el aparcamiento de Haya Seca siguiendo el sendero AG-1, que asciende por el Santuario y La Escupidera, bajando por el Collado de Castilla y Peña Nariz.

Partimos del aparcamiento de Haya Seca (1583 m), ubicado en la falda NE del Moncayo y al que se llega por una pista forestal que sube desde el Centro de Interpretación de Agramonte. Arrancamos por el camino que sale de frente, ignorando otro que sale hacia la derecha en dirección al Collado de Pasalobos y Peña Negrilla, por el que haremos la vuelta.

Tras unos 900 m en suave pendiente ascendente, en los que pasamos por la Fuente del Chorro, llegamos al Santuario de Nuestra Señora del Moncayo (1610 m), que también es albergue y restaurante, y que está ubicado al pie de una gigantesca piedra negruzca llamada “cucharón”.

En la parte alta del templo, junto a otra fuente, enlazamos con el GR-90, que por la izquierda baja hacia la Ermita de San Gaudioso y Lituénigo y de frente, por donde seguimos, sube hacia Collado Bellido y Purujosa.

A los pocos metros dejamos el GR, desviándonos a la derecha hacia el Moncayo. El nuevo sendero (AG-1) sobrevuela inicialmente el Santuario y luego asciende haciendo zetas por un denso pinar, salpicado por alguna que otra haya.

Sobrepasada la cota 1800 m, dejamos atrás el bosque y salimos a terreno un poco más despejado, por el que alcanzamos la base del Pozo de San Miguel. Esta sobrecogedora y espectacular hoya, ubicada al pie del circo glaciar más septentrional de la sierra, es conocida también como “El Cucharón”. Hacia la derecha vemos el Moncayo; de frente, la cuerda que lo une al Cerro de San Juan, sobre la que en invierno se forma una amenazadora y peligrosa cornisa; y a la izquierda, la empinada diagonal hacia La Escupidera.

A partir de aquí comienza la parte más dura de la ruta: 1,8 km de subida ininterrumpida, guiada por hitos, en los que superamos más de 400 m de desnivel hasta alcanzar la cuerda. La senda se tira inicialmente hacia la izquierda, trazando unas fatigosas zetas en busca de la arista que separa el Circo de San Miguel del de Gaudioso.

Una vez en la divisoria y tras asomarnos fugazmente a la Hoya de San Gaudioso desde su pared más escarpada, continuamos la ascensión, ya de forma más lineal, hasta llegar a La Escupidera.

Por este nombre de “utensilio doméstico que recoge las expectoraciones” se conoce a un paso de unos 100 m de longitud y acusada pendiente lateral, que obliga a extremar las precauciones en condiciones invernales. Comienza a unos 2170 m de altitud y antes estaba señalado con un letrero que advertía del peligro de deslizamiento y caída al vacío en caso de nieve dura y hielo, pero a día de hoy se ha borrado y solo quedan unas estacas que sirven de referencia. Por desgracia, su leyenda es negra, ya que en los últimos años se ha cobrado la vida de no pocos montañeros. Sin nieve no supone mayor problema, aunque toda precaución es poca.

Superado el trago y con un brusco giro a la izquierda, nos alejamos del abismo y sobrevolamos el Circo de Gaudioso hasta alcanzar la cuerda en el Alto del Collado de las Piedras (2259 m). Este paso de montaña, a caballo entre los Cerros del Corralejo (o Pico Morca) y el Moncayo, está coronado por un gigantesco hito cónico.

Allí giramos a la derecha por la senda cimera que recorre la cuerda, por la que se camina fácilmente. Con nieve hay que tener cuidado de no dejarse caer hacia la derecha, porque son frecuentes los aludes desde la cornisa y puede ser fatal. Pero en condiciones normales, merece la pena hacerlo para contemplar el Pozo de San Miguel.

Entre nosotros y el Moncayo se interpone todavía una cima, que se pasa sin pena ni gloria. Se trata del Cerro de San Juan (2282 m), rematado por otro hito y al que, ensombrecido por su vecino mayor, le queda el honor de presidir el circo glaciar.

Desde él bajamos al Collado del Alto de las Piedras (2256 m), para a continuación afrontar la subida final al Moncayo o Pico de San Miguel (2315 m), apenas 500 m en suave pendiente.

La cima es quizá lo más feo de esta majestuosa montaña. Una vasta meseta con poca gracia, pero grandes vistas que abarcan hasta Los Pirineos. Eso sí, si está despejado, lo cual, según los lugareños, suele ser la excepción a no ser que se madrugue. Nosotros nos encontramos la típica “boina de nubes”, que por suerte se desvanecía por momentos. Sorprendentemente, desde lo alto no se ve todo. Si queremos asomarnos al Cucharón hay que desplazarse unos 200 m hacia el E; y para ver las tierras sorianas hay que hacerlo hacia el O.

A día de hoy, la cumbre está “adornada” por 5 elementos: una minúscula capilla dedicada a San Martín, dos monolitos, uno de los cuales soporta la figura de la Virgen del Pilar sobre la Cruz de Santiago, un vértice geodésico y un gigantesco vivac.

La pequeña estatuilla de la Virgen del Pilar, patrona de Aragón, fue traída hasta aquí en 1960 por miembros del Stadium Casablanca, un club deportivo de Zaragoza fundado en en 1947 por el sacerdote Francisco Izquierdo. Desde los años 80, un grupo de jóvenes de la Asociación de la inmaculada y el Colegio Corazón Inmaculado de María de Sentmenat (Barcelona) suben al Moncayo uno de los primeros fines de semana de septiembre, arreglan los desperfectos de la Pilarica y repasan con pintura roja la Cruz, que recuerda la aparición de la Virgen al apóstol en el S.I.

El vértice geodésico representa el punto más alto del Sistema Ibérico y de las provincias de Soria y Zaragoza.

El descenso lo hicimos siguiendo una senda, empinada y pedregosa, que zigzaguea por la cara O hasta el Collado de Castilla o de Pasalobos (1949 m). No es difícil, pero el terreno está muy fragmentado. Abajo vemos Cueva de Ágreda, aldea soriana desde la que parte una ruta que asciende al Moncayo por el Barranco del Colladillo (GR-86).

Una vez abajo, obviamos un ramal que sale de frente hacia Peña Negrilla (hoy tapada por la niebla) y giramos a la derecha (dirección N) por el sendero AG-1, que baja por el Barranco de Agramonte (también llamado de Castilla o de Valdiez).

Tras unos 700 m, en un desvío señalizado por un gran hito y una baliza, giramos de nuevo a la derecha para adentrarnos en el pinar, en el que encontramos un chozo en ruinas.

A partir de ahí la senda se vuelve más incómoda, ya que se abre paso a través del enorme canchal que tapiza la ladera N del Moncayo.

Al fondo del mismo, identificamos un promontorio rocoso que asoma al valle conocido como Peña Nariz (1840 m). Para llegar a ella hay que bajar apartándose unos metros del sendero, pero merece la pena porque es un extraordinario mirador.

Pasada ésta, nos adentramos en el bosque de Haya Seca, donde enseguida retomamos un sendero al uso, que serpenteando entre pinos, hayas y algún que otro tejo y acebo, regresamos al aparcamiento.

Desde el punto de vista técnico, el recorrido no reviste complicaciones si no hay nieve ni hielo. En condiciones invernales, el mencionado paso de La Escupidera y el posterior descenso por la cara O requerirán tener cuidado y llevar crampones y piolets para evitar accidentes.

En resumen, una ruta espectacular que combina la clásica vía de ascensión al Moncayo con una bajada diferente por el Collado de Pasalobos y el Barranco de Agramonte. Exigente físicamente pero con unas vistas que compensan el esfuerzo.