En su implacable avance por la península Ibérica, los romanos encontraron en Los Ancares un serio obstáculo. Sin embargo, en contra de lo que se creía, hay evidencias de que consiguieron atravesarlos e incluso acampar en ellos. Después de fundar Lugo (Lucus Augusti) en el año 25 a.C. y montar allí un enclave permanente, los romanos emprendieron una campaña bélica para la conquista del área astur-cántabra, avanzando de oeste a este y estableciendo 2 campamentos de avanzadilla en Los Ancares. Dichos asentamientos temporales se han localizado en A Recacha y Granda das Xarras, entre Balouta y Cuatro Carballos. Estas acciones militares formaron parte de las llamadas Guerras Cántabras, entre los años 29 y 19 a. C. Se dice que fue tal la resistencia que encontraron en las gentes y la orografía de esta tierra, que el mismísimo César Octavio Augusto se vio obligado a abrir las puertas del Templo de Jano en señal de combate total y acudir personalmente hasta aquí para asumir el liderazgo de la batalla.
Más de 2000 años después, nuestros tres jóvenes héroes, Álvaro, Lucía y Carlos (de 10,10 y 12 años, respectivamente), emulando la gesta romana, consiguieron recorrer en un día todas las cumbres de esta sierra desde el Puerto de Ancares hasta Deva, estableciendo también un campamento-vivac nocturno en la Campa de Brego, en la que, por que no, bien pudieron haber descansado las huestes romanas del gran emperador César Augusto.
Esta ruta es un homenaje a ellos…
FUENTE DE INFORMACIÓN: Cartografía del Instituto Geográfico Nacional, visor Iberpix 4. FOTOGRAFÍA: móvil Samsung y alguna foto de archivo. ZONA: Sierra de Los Ancares, provincias de León y Lugo, Comunidades de Castilla-León y Galicia. DESDE: Puerto de Ancares, Lugo* (ver nota aclaratoria más abajo). CERCA DE: Balouta, Suárbol, Piornedo, Vilarello, Deva. ÉPOCA: agosto de 2015. Tiempo despejado. Tª: 10-23 ºC. TIPO DE RUTA: lineal, solo ida. NIVEL DE DIFICULTAD: moderado-alto. Datos descargados de GPS GARMIN: Longitud: 18,86 km. Desnivel acumulado positivo: 985 m. Desnivel acumulado negativo: 1559 m. Cota máxima: 1981 m. Cota mínima: 1114 m. Tiempo empleado: 1 día 52 min (con vivac), 8-10 h (sin vivac). MATERIAL: GPS, senderismo (sin nieve). Raquetas, piolets, crampones, casco (con nieve, hielo). AGUA: No hay fuentes. En la parte final se atraviesa el río de Brego.
ITINERARIO:
Puerto de Ancares (1669 m) – Alto del Puerto (1682 m) – Refugio del Puerto de Ancares (1648 m) – Bajocima de Peña Venera – Collado de Cabana (1762 m) – Pico Brañutín (1886 m) – Alto de Cuiña (1992 m) – Collado (1756 m) – Pico Penalonga (1896 m) – Mallada del Mostallar (1699 m) – Pico Mustallar (1934 m) – Pena del Castillín o del Portillín (1881 m) – Pico Lanza o de Lagos (1866 m) – Collado (1749 m) – Corno Maldito (1859 m) – Charcas (1849 m) – As Merendas (1796 m) – Os Penedois (1786 m) – Tres Bispos (1794 m) – Campa das Ovellas (1703 m) – Campa de Tres Bispos (1576 m) – Golada da Vara (1467 m) – Refugio de Brego – Campa de Brego (1380 m) – Serra das Maseiras – Deva (1104 m).
Descárgate la ruta y accede a más información (mapas, waypoints, altimetrías) en el siguiente enlace de Wikiloc:
Del Alto de Balouta a Deva por la cuerda de Los Ancares
EL ENTORNO:
Descubre más acerca de la zona en el siguiente enlace:
Los Ancares
LA RUTA:
La ruta de hoy, con vivac en la Campa de Brego incluido, une el Puerto de Ancares con la perdida aldea de Deva, pasando por todos los picos más emblemáticos del cordal principal de Ancares a excepción del Miravalles y el Penarrubia. Subimos 8 picos principales (Cuiña, Penalonga, Mostallar, Lagos, Corno Maldito, Charcas, Os Penedois y Tres Bispos) y 2 secundarios (Brañutín y As Merendas).
Partimos del Puerto de Ancares*, ubicado a 1669 m de altitud en lo alto del valle del mismo nombre y conocido también por los lugareños como “Alto de Balouta“. Comenzamos subiendo por la llamada Ruta del Lago Cuiña, un estrecho sendero que arranca en dirección SO desde el lado derecho de la carretera (viniendo de Balouta).
Puerto de Ancares (1648 m).
(*) NOTA ACLARATORIA: Según un informe elaborado por el Instituto Geográfico Nacional, El Puerto de Ancares (1669 m) pertenece a Lugo. De esta forma se pone fin a un conflicto judicial entre los concejos de Navia de Sarna y Candín. Ver enlace: El puerto de Os Ancares se queda en Lugo
De entrada subimos un pequeño cerro, el Alto del Puerto (1682 m), desde el que bajamos al Refugio del Puerto de Ancares (1648 m).
Subiendo al Alto del Puerto.
A la derecha, nuestros tres próximos objetivos: Peña Venera, Brañutín y Cuiña.
Valle de Ancares.
Refugio del Puerto de Ancares (1648 m). Detrás, Peña Venera.
Desde allí, iniciamos una exigente ascensión al pico más septentrional del Circo glaciar del Cuiña, Peña Venera (1813 m). La senda pasa por la ladera O del pico, unos 60 m por debajo de su cima. Si se quiere subir a ella hay que desviarse por una trocha, pero no lo hicimos, sino que seguimos de frente hacia el Collado de Cabana (1762 m).
Collado de Cabana (1762 m). De frente, el Valle del Ancares.
A continuación, ignorando un ramal que sale a la izquierda en dirección al Lago del Cuiña y El Campanario, subimos al Brañutín (1886 m), un pico sin nombre en los mapas del IGN, pero con una preciosa y escarpada ladera E.
Subiendo al Brañutín.
Vista atrás desde la cima del Brañutín (1886 m). Abajo, Peña Venera.
Abajo, en dirección O, Piornedo y Suárbol. Abajo, hacia el E, la Cuesta el Campanario.
Circo glaciar del Cuiña visto desde la cima del Brañutín.
Sin apenas esfuerzo, bajamos hasta el collado (1833 m) que separa los Valles de Ancares (al E) y del río de la Vega (al O), para afrontar unos 700 m de dura ascensión por la ladera N del Cuiña.
Bajando al collado (1833 m). De frente la ladera N del Cuiña.
Abajo, la Laguna glaciar del Cuiña (Pozo Ferreira) y detrás, El Campanario.
Valle de Ancares. Vista O.
Senda de subida por la ladera N del Cuiña.
De frente, Penas Apañadas (dcha) y El Campanario (izda).
La cima del Alto de Cuiña (1992 m) es bastante amesetada y no es de las más bonitas de la sierra, pero las vistas si hacen honor al que es el “techo de Ancares”.
Cima del Alto de Cuiña (1992 m).
En la cima del Cuiña.
Abajo, Penas Apañadas y detrás, El Campanario o Dos Hermanitos.
Vista panorámica SO.
Picos Penalonga (derecha) y Mostallar (izquierda) vistos desde el Cuiña.
Siguiendo la senda que recorre la cuerda, descendimos hasta el collado (1756 m) ubicado al SO, un paso de montaña a caballo entre los valles del río de la Vega y del Burbia.
Bajando del Cuiña.
Collado (1756 m). Al fondo, el Penalonga y detrás, el Mostallar.
Valle del Burbia.
Vista NO hacia el Valle del río de la Vega. Al fondo, Suárbol.
Sin apenas descanso, de nuevo tocó subir, otros 700 m en los que superamos 130 m de desnivel hasta la cima del Penalonga (1896 m). En este punto abandonamos tierras leonesas para pasar a Galicia.
Cima del Penalonga (1896 m). Al fondo, el Cuiña.
Vista NE desde el Penalonga.
Para bajar del pico por su falda SO hay dos opciones. Una es bajar directamente pegados a la valla de separación de Galicia y León, pero es complicado porque es más pendiente, hay más piedras y está más cerrado de matorral. La otra, que es por la que optamos, es continuar en dirección NO por el espinazo del Penalonga hasta dar con una trocha que baja en diagonal a la Mallada del Mostallar (1699 m). De esta forma evitamos los incómodos canchales de la parte alta de la ladera.

Abajo, la Mallada del Mostallar, al pie del pico del mismo nombre.
La escarpada y vertical cara N del Mostallar.
En el collado conectamos con el camino que sube desde Piornedo y comenzamos la ascensión más dura de la ruta, unos 900 m al 25% de pendiente media por la arista NO del Mostallar, salvando 235 m de desnivel.
Mallada del Mostallar y arista NO.
Valle del Burbia desde la Mallada del Mostallar.
Vista atrás del Penalonga desde la ascensión al Mostallar.
La panorámica desde la cima (1934 m) es la razón por la que el Mostallar o Mustallar, techo de los Ancares gallegos, es una de mis montañas favoritas. Un lugar que invita a sentarse, disfrutar del silencio y dejar que la vista y la mente se pierdan en el horizonte.
Cima del Mostallar (1934 m).
Hito y monigote en la cima del Mostallar (1934 m).
Abajo, el cordal de las Peñas de los Bodegois separando el Valle de Vilouso (dcha) del Valle del Burbia (izda).
Cuerda de los Ancares hacia el Penarrubia (dirección SO).
El comienzo de la bajada es sencillo, pero enseguida nos encontramos con el escollo de la Pena del Castillín o del Portillín (1881 m), el rocoso hombro occidental del Mostallar. El paso de este risco por su cima es un pelín complicado y aéreo. Hay que trepar y asumir cierto riesgo. En esta ocasión, decidimos bordearlo por su derecha, también con cuidado de no resbalar.
Descenso desde el Mostallar hacia la Pena del Castillín (izquierda).
En primer término, la impresionante mole rocosa de la Pena del Castillín (1881 m).
Superado el trámite, seguimos por la cuerda en dirección al Pico de Lagos o Lanza (1866 m). A nuestra izquierda, el Valle de Villouso y sus lagunas glaciares.
Abajo, las Lagunas de Villouso y al fondo, Corno Maldito (dcha) y el Pico de Campo Longo (izda).
Vista atrás del Mostallar desde el Pico de Lagos.
Cima del Lanza o Lagos (1866 m).
Los dos siguientes objetivos se confunden con cierta frecuencia, incluido el IGN, que a día de hoy tiene mal señalizado el Charcas en sus mapas (lo sitúa en As Merendas). Vistos desde el Lagos, Corno Maldito es el pico redondeado que queda a la izquierda y carece de hito en la cumbre, mientras que el Charcas es el siguiente a la derecha, de silueta triangular rematada por un gran hito.
Corno Maldito y Charcas vistos desde la ladera del Pico de Lagos.
Para llegar a la cima de Corno Maldito (1859 m) desde el Lanza hay que bajar al collado (1748 m) y luego desviarse un poco de la senda cimera.
En la cima de Corno Maldito (1859 m).
Vista atrás del Lanza y el Mostallar desde Corno Maldito. Abajo, el collado (1748 m).
Valle y Lagunas de Villouso vistas desde Corno Maldito.
A continuación, bajando del pico campo a través por su suave ladera O, nos reincorporamos al sendero para hacer cima en el Charcas (1849 m).
Cima del Pico Charcas (1849 m). Abajo a la izquierda, As Merendas.
Vista atrás del cordal desde el Pico Charcas.
Entre al Charcas y Os Penedois se interpone una pequeña y curiosa montaña, olvidada en los mapas, pero conocida por los ancareños como As Merendas (1796 m). La senda la rodea por la derecha, aunque es bonito pasar por su cima y contemplar desde allí el rocoso cresterío que tenemos por delante.
As Merendas vista desde el Charcas (foto de archivo).
Os Penedois vistos desde As Merendas.
Os Penedois (1786 m), también conocido como “Os Penedos de Donís“, es una pequeña cresta multipico que separa el Valle del río Ortigal del de Porcarizas. Su paso cimero es un poco aéreo, aunque es ancho, y si no hay nieve ni hielo se recorre sin problemas. Eso sí, en la parte final hay que hacer un pequeño destrepe por su lado izquierdo en el que hay que ayudarse con las manos.
Iniciando la subida a Os Penedois.
Paso de Os Penedois.
Superado el escollo, nos encontramos con la última cumbre del día, el Tres Bispos (1794 m), a cuya cima se accede mejor rodeándola por el E.
Vista atrás de Os Penedois.
Subida final al Tres Bispos.
Cima de Tres Bispos (1794 m). Al fondo, el gancho del Penarrubia.
Cuerda de Ancares desde el Tres Bispos.
Orgullosos por haber completado la cuerda, pero ya algo cansados, descendimos por la ladera E del pico hasta la Campa das Ovellas (1703 m) y la Campa de Tres Bispos (1576 m).
Campa das Ovellas. Campa de Tres Bispos.
Desde ésta última salen dos sendas: una en dirección NO, la principal, que es una pista que nos lleva al Albergue de Ancares y Campa da Braña; y otra en dirección S, que es la que cogimos. Se trata de una estrecha vereda de 1,5 km, que discurre por un frondoso robledal en el que apenas entra la luz y que termina en la Golada da Vara (1467 m). Para mi, este es uno de los senderos más bonitos y mágicos de Ancares.
Final de la vereda en la Golada da Vara (1467 m).
En la Golada nos encontramos un camino, que hacia la derecha conduce a Cabanavella y el Refugio de Ancares. Nosotros lo tomamos hacia la izquierda para bajar hasta el Refugio de Brego y la campa del mismo nombre, donde montamos nuestra tienda a orillas del río Brego.
Refugio de Brego.
Campa de Brego.
Tras una noche mágica, tan sólo alterada por el constante mugir de las vacas, desmontamos la tienda, desayunamos y cruzamos el río. Al otro lado, tomamos un sendero que nos condujo por la Serra das Maseiras durante unos 5 km hasta llegar al recóndito pueblecito de Deva, final de nuestra aventura.
Campa de Brego.
Desde el punto de vista técnico, el recorrido carece de dificultad, a excepción de los comentados pasos de la Pena del Castillín y Os Penedos de Donís. La dureza de la ruta vino determinada por la distancia recorrida (casi 19 km), el fuerte desnivel acumulado total de más de 2500 m y la subida a los tres primeros picos (Cuiña, Penalonga y Mostallar).
Una vez más Ancares, uno de esos pocos lugares de España donde el hombre parece que todavía no ha dejado su deletérea huella. Ancares es silencio, es paz, es verdes y profundos valles delimitados por hermosas cumbres desde las que se alcanzan vistas infinitas. Si la complejidad de los accesos es la única razón por la que, de momento, este paraíso escondido permanece inmune al poder controlador y destructivo del hombre, confiemos en que aquellos no mejoren y Ancares siga siempre quedando lejos de todo…